Un mediador familiar es un profesional capacitado y acreditado para ayudar a las personas a resolver conflictos relacionados con la familia, como la separación, el divorcio, la custodia de los hijos, el mantenimiento económico, entre otros. El objetivo del mediador familiar es ayudar a las partes a comunicarse de manera efectiva y a llegar a un acuerdo mutuo sobre los términos de la separación o del conflicto en cuestión.
La mediación familiar es un proceso voluntario y no obligatorio, en el cual el mediador actúa de manera neutral y no tiene el poder de tomar decisiones por las partes. El mediador ayuda a las partes a identificar sus intereses, necesidades y preocupaciones, y a encontrar soluciones creativas que satisfagan las necesidades de ambas partes.
El mediador familiar es un profesional capacitado, ya sea en derecho, psicología o trabajo social, y está acreditado por organismos especializados. Los mediadores familiares son profesionales independientes y no están vinculados a ninguna institución o parte involucrada en el proceso de mediación.
En resumen, un mediador familiar es un profesional independiente y capacitado que ayuda a las personas a resolver conflictos relacionados con la familia de forma amistosa y consensuada, mediante la comunicación y el diálogo.